Camino sin mirar,
rodeada de imágenes maravillosas.
Miradas angelicales,
risas de felicidad.
Y no es un sueño
todo es verdad.
Dime, tú que estás en los cielos
¿lo enviaste a cuidarme?
Está y es mágico.
¿No estoy soñando y siempre estará?
Lo amo tanto señor de allá arriba
¿Dime por favor, hasta cuándo tendré
felicidad?
Es tan inmenso el goce que siento
soy otra y no sé parar.
Es mío entero en noches de relámpagos,
soy suya y me da dicha sin par.
Alejandra Zarhi-
Pingback: 28 de febrero de 2018 : : Cronica Literaria