México prácticamente se le atravesó a Jorge Luis Borges: la Biblioteca Nacional, que dirigió tantos años, estaba ubicada en la calle bonaerense que lleva el nombre de nuestro país. En su infancia se halló con La conquista de México de William Prescott, que fue una de sus primeras lecturas. Ya de joven admiró al poeta mexicano Ramón López Velarde y, poco tiempo después, apareció en su vida Alfonso Reyes, a quien conoció en Argentina y siempre reconoció como uno de sus maestros.
En este volumen Miguel Capistrán ha compilado por primera vez una valiosa antología de cuentos, poemas y ensayos del escritor argentino donde México es el protagonista o se asoma de manera circunstancial y enigmática. Borges y México también reúne los textos de una veintena de escritores que evocan e invocan sus encuentros con la figura literaria y humana más universal de los escritores hispanoamericanos.
Sin duda, el libro constituye una prueba fehaciente del fervor de los escritores y lectores mexicanos por el universo borgeano. En ese sentido, destaca el juicio definitivo de Octavio Paz en su luminoso ensayo «El arquero, la flecha y el blanco»: «El punto de vista de Borges es su arma infalible: trastorna todos los puntos de vista tradicionales y nos obliga a ver de otra manera las cosas que vemos o los libros que leemos». (Editorial Lumen)