No puedo demorar este momento. Vivo
como aquel que soñó adentrarse en el aire
y encontrar el misterio que tienen las alturas. Ver
cómo encapota aquel cielo sombrío y cómo
alguien camina por un yermo extendido donde
no existen más rastros del último verdor. Tiembla
cada ser. Se agita una presencia de años
y años con la misma zozobra. Y al fin
queda solo el más simple mirar desde una
empañada ocasión y una nueva promesa
hasta hoy no cumplida.
Julio Bepré-