Me crecen alas
en el costado simétrico del alma.
La libertad me atrapa,
y un grito sordo
me estremece.
Siento el sol
dentro muy dentro
y al caer la luna
despierto en sueños.
Clamo, rió, canto,
la melodía silenciosa que me atrapa.
Despierto, huyo, me escondo
en la sinuosa historia
de los días.
Y mis alas crecen,
crecen se expanden, rezan
en un atardecer cualquiera.
Evocando la calma
me crecen alas,
y crecen en mi alma.
Magdalena Bo-