Espíritu y materia, combinados,
suceso substancial del universo;
no sé cuál de los dos es el anverso
ni qué logros consiguen, separados.
Se repiten en los hechos cimentados,
en el bien, en el mal, en el esfuerzo;
no sé cuál de los dos es el reverso
pero siempre estarán amalgamados.
Bello enigma de siglos recorridos…
cíclicos son, espíritu y materia,
y aún así, en el cosmos se eternizan.
Lo tangible y lo etéreo suspendidos
en la luz y en la sombra de una arteria,
por la vida y la muerte se deslizan.
Betty Badaui-