Quédate. Déjale el río
a los peces que lo nuestro es defendernos
de este abrir temprano de las oficinas
y este saludo a la bandera en los colegios de pago.
Esquivemos el juramento sucio de querernos
que a estas horas y por todos lados
va tocando las bocas de los matrimonios felices
convirtiendo los besos en las sobras de una cena familiar.
La prisa es la costumbre de los que no aman
y en los jardines, ya las hormigas salen por migajas
de hojas pero mi hambre
no se acaba en el café del desayuno
ni mi sed es de agua ni mis ansias de pan.
Sebastián Zampatti-
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