Tan chiquitita de curiosidad
lo mas honesta posible
tan frontal que arremete
humor de pulperia, comida de amor.
Así es mi mamá.
De tu vientre me diste la fuerza.
De tu lengua me diste la agudeza de decir
palabras delicadas de amor.
Gracias te di el día que llore de tu mano.
Sé que sabes que sufriste cosas peores
que siempre tu frente en alto te mantuvo
en el camino de los vencidos.
Llegar a viejo no es lo peor.
Peor es que tus ojos pierdan ese brillo
que tuvieron el día en el que vi la luz.
Adriana Heredia-