Poemas

Cornisa de espanto

Me empuja la brisa

a la cornisa del llanto.

Miro el abismo,

no me atrevo,

giro,

corro,

escapo.

 

Busco el camino

bordeado de golondrinas,

de espejos rotos,

que me lleve,

me acerque,

me detenga

en tu mismo espacio.

 

Oigo tu voz.

La luz que emanan tus manos

me guía,

me eleva,

me incita

a seguir caminando.

 

Espejismo frágil

que se rompe

al oír

el suave aleteo

de un pájaro.

 

De nuevo me empuja la brisa

a la cornisa del espanto.

 

Del libro Miel y ajenjo… los sabores de mi boca

Cristina Monte-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *