Son mis voces que gritan su dolor.
Son ellas que se emocionan con la luna
cuando el silencio se amotina en los otros.
Son las mismas que en la noche profunda
forman una tribu de palabras desconocidas
que se levantan en pie de guerra
en el abismo de mi garganta.
Son esas voces que gritan su pavura
mientras otros, allá afuera
se alimentan de oxidadas brújulas
y de la astucia de los mudos.
Del libro inédito Pasajeros del Vacío
Aldo Novelli-