Aroma de flor que trae
tristezas a mis recuerdos,
sonidos de besos jóvenes,
ilusiones de otros tiempos.
Todo pasa y todo queda
advierten, sabios, los versos;
bellezas que se marchitan,
ojos que el amor perdieron…
Grave es que ese sueño siga
latiendo vivo en el pecho,
amando amores dormidos,
despertando sueños viejos;
¡dos de la mente, ilusos
heridos de cana y tedio,
somos antiguos amantes
incendiando nuestros cuerpos;
noches que resucitamos
en la mente y sus espejos
y ya no somos nosotros…
Ah, tiempo traidor, ah, tiempo…
Martín G. Batista-