Gime la palabra
su perdón de sílabas
en el rostro del silencio.
La espesura devora los secretos,
y la memoria se lleva las metáforas
con una lluvia negra
de pájaros sin nombres.
Por los huecos de la tempestad
se destensan los violines
y no hay tiempo musical
en la fecundidad del pentagrama.
El poeta
clausura el fervor de los versos.
Su voz, se desborda dolida
sobre la huella de un instante
que ha perdido la cordura.
Luego, y a modo de despedida,
cae de rodillas
porque sabe que hay un ángel
de la muerte,
que asesina a la belleza.
Víctor Hugo Tissera-
Ud asesina las ideas en el espanto de su poesía. La lírica exige síntesis en el verso, idea y metáfora creativa… ¿dónde están en sus temas? Sr. No dé vergüenza ajena… ¡Por favor!