al ver los escombros
se baja del carro
golpea la puerta
y pregunta
si los puede llevar
un hombre gordo
en malla
le dice que sí
que se los lleve nomás
y el hombre
se alegra
con la pala
raspa el pavimento
mientras el sol
da mucho cielo
un montón de ramas
y una hormiga colorada
quedan contra la vereda
eso no le sirvió
piensa el gordo
entonces descubre
urgentes aporías
sobre la percepción
la utilidad
y la muerte
luego
nuevamente lo ocupa
la construcción de su destino:
paciencia y palabras
Alejandra Schimidt-