Inconscientes

Inconscientes es una novela que relata la historia de Esteban, un joven que sufre un accidente y queda en coma. Esteban despierta en un plano en el que le dicen que para volver a la vida, tendrá que realizar un viaje lleno de peligros y batallas.
Esteban e Ignacio, son compañeros de trabajo y amigos. Un día como cualquier otro, sufren un accidente que pone sus vidas en peligro y son inducidos a coma.
Esteban despierta en la oscuridad. La luz viene acompañada de un hombre que dice llamarse Gabriel y que será su guardián en el plano que ha despertado, uno diferente al que vivió toda su vida.
Gabriel le comunica que deberá realizar un viaje completamente solo, con muchos peligros, y deberá luchar para recuperar su cuerpo, su vida y todo lo que ama.
El plano esta inspirado en la antigua Roma, donde uno tenia que callar todos los miedos y convocar a la valentía para enfrentar a su oponente cara a cara.
Sus seres queridos, en el plano terrenal, asisten sus cuerpos en búsqueda de una recuperación que los doctores determinan prácticamente imposible.
Soldados oscuros, demonios, animales, herreros y guardianes, serán los que faciliten o dificulten su viaje.
Entrenamientos con espadas, escudos y mucha técnica, serán los encargados de definir si Esteban logra alzarse con la victoria y volver a los brazos de su amada, o perecer en el intento y sucumbir a las garras de la muerteEl plano esta inspirado en la antigua Roma, donde uno tenía que callar todos los miedos y convocar a la valentía para enfrentar a su oponente ompletamente solo, con muchos peligros, y deberá luchar para recuperar su cuerpo, su vida y todo lo que amacara a cara.
Sus seres queridos, en el plano terrenal, asisten sus cuerpos en búsqueda de una recuperación que los doctores determinan prácticamente imposible.

Soldados oscuros, demonios, animales, herreros y guardianes, serán los que faciliten o dificulten su viaje.

Enfrentamientos con espadas, escudos y mucha técnica, serán los encargados de definir si Esteban logra alzarse con la victoria y volver a los brazos de su amada, o perecer en el intento y sucumbir a las garras de la muerte. (Editorial Vela al Viento)