Poemas

A veces

Te quedaste ciudad de mis amores

encuadernada y sola en un estante.

La vida es tren que marcha hacia adelante

con su carga de dichas y dolores.

 

Abro a veces tu libro de memorias

y empiezo a andar por calles del pasado

buscando una vez más lo que he dejado,

juntando los pedazos de mi historia.

 

Entonces aparecen de repente

esas veredas de baldosas rotas

y el compás de algún tango con sus notas

que hacen vibrar el alma de tu gente.

 

Y hasta siento tu olor, Montevideo,

algo así como a trafico y a pizza,

a almacenes de barrio y a la brisa

que mueve las barquitas del Buceo.

 

Como surgiendo del asfalto mismo

entre vino y sudor, ritmo y colores

escucho que se acercan los tambores

y más y más me envuelve ese espejismo.

 

Tan íntimo, tan mío es ese instante

que quisiera dormirme entre tus brazos

pero se abre una puerta y oigo pasos,

te vuelvo a colocar en el estante.

 

Angelita Gómez-

 

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