Poemas

Los monstruos

Surgen de lo más profundo del armario. Son unos gritos guturales, horripilantes y continuados que a veces se trasladan debajo de la cama.
Incomprensiblemente se detienen cuando entran mis padres o cuando se enciende la luz.
Tengo mucho miedo. Cada noche retraso todo lo que puedo la hora de ir a la cama, pero mis padres son inflexibles y cuando se acercan las diez ya empiezo a temblar. Tampoco me dejan tener la puerta abierta ni la luz encendida porque dicen que un niño de siete años ya es demasiado mayor para creer en fantasmas, monstruos y estas cosas.
Lo peor de todo es que mi miedo va creciendo y, aterrorizado, me hago pis en la cama. Ayer volvió a ocurrir y mis padres entraron en la habitación muy enfadados. Mi madre me arrancó las sábanas mientras gritaba que un niño no debe inventarse cosas y mi padre me metió en la ducha con agua fría, amenazándome con que si eso se volvía a repetir me encerraría en el armario una semana.
Ahora estoy en la cama mucho más tranquilo. Ya no me hago pis y no es que no tenga miedo a los sonidos y gritos del armario, es que tengo mucho más miedo a los gritos y amenazas de mis padres. Ellos están contentos porque dicen haber conseguido curar mi “cuentitis”.

Joan Mateu-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *