La esperanza
tiene una sonrisa de oreja a boca.
Es el futuro que viene de costado
asumiendo que viene
y viene.
El futuro era hoy
esperanzado en sonreír
por lo menos
de oreja a boca.
Yo quiero poner un verbo,
amotinarlo
en el centro de un hoja,
para que la esperanza sea
de oreja a oreja.
Ricardo Mastrizzo-