Hazme poema,
verso,
pájaro suelto,
vivo fuego o
mar sereno.
Hazme abismo
precipicio
eco
de mi mejor
silencio.
Hazme tus armas,
declara (me)
tus guerras.
Hazme el viento
en tu pollera
y bajo sábanas
tus besos.
Hazme la noche,
la calma y desnuda
violencia
de los dos amantes.
Hazle el tiempo
quieto,
el paraíso
ido;
hazme el encuentro
y el desencuentro
y hazme feliz
al final del cuento.
Hazme en tus manos
como si fuese
arcilla
pero por favor
hazme,
mujer,
que no estoy hecho.
Sebastián Zampatti-
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