Su cuerpo está congelado. Sus ojos cerrados han visto la muerte. Sus labios parecen estar a punto de decirnos algo.
Un joven descubre el cadáver de una chica debajo de una gruesa capa de hielo en un parque del sur de Londres. La inspectora jefe Erika Foster será la encargada de dirigir la investigación del caso, mientras lucha contra sus demonios personales.
Cuando Erika comienza a indagar en el pasado de la víctima, todo parece apuntar a que su asesinato está conectado con el homicidio de otras tres mujeres que fueron encontradas también bajo las aguas heladas de otros lagos en Londres. Poco a poco, Erika se aproxima a la verdad, sin sospechar que alguien la está observando y se acerca cada vez más a ella.
La nueva publicacion de Robert Bryndza fue calificada como «Una lectura que atrapa, con un final totalmente sorprendente. Absolutamente necesaria para todos los fans de la novela criminal». (Editorial Roca Trade)