Allí donde los cuerpos esculpen bocas,
en rincones iluminados por el siroco, te espero.
En mutismos de pactos filmados
con sangre en cada pesadilla,
ritos privados
despliegan esqueletos,
frágiles ligazones
siguen caminos que no conozco.
Para poseer lo que no poseo,
debo recorrer rutas
para ser quien aun no soy.
Libero mi corazón
y sus vericuetos
en aortas de noches,
que callando se aproximan.
Mientras trabajo
invisibles herramientas
vigilo fugas de perversos,
polimorfos momentos.
Estilizo mi columna vertebral
en actitudes de quien ama,
sembrando pretiles en alertas sabidurías de ignorancia.
Del libro Abrázate fuerte
Jaime Icho Kozak-