Siento tu piel muy mía
Y al universo desmadejarse en soles
Cuando en cada caricia me devuelves lamentos
La carrera del tiempo se detiene, y se escucha el silencio
Somos dos, únicamente almas que se quieren
Únicamente cuerpos que se buscan
Y entre esas dos almas y entre esos dos cuerpos
Están los soles en llamas del universo entero
Y no temo quemarme porque la nieve aguarda
Y no temo ser hielo porque el calor aguarda
Y ya nada pre existe.
Pues la nada no existe
Porque el todo me abarca
María Alicia del Rosario Gómez-