el sol golpea su pecho y dice
cualquiera que fuese su orden y fundamento
soy luz soy el sol y de mí se depara
todo lo que se llame día e incentive
el ciego y sordo hervor de lo que viva
más allá de estos confines
que establece esta mi masa que arde
reina como un murmullo desacato
un vacío de mí que es y ha de ser la noche
en ella tal y como esclavas
otras estrellas hechas de tiempo y distancia
esparcen reino y sed y densa
negrura
pero evasiva y mujer
fundada por mi propio mito
giras y entras y alejas y aun ocultas
te sigo para desesperar
esa deriva ondulante y ajena
escena y también fuga
atas todo esplendor
a tu brillo insensato
y entonces comprendo que me quemo
tal un ícaro blasfemo
de arrogancia inocente
y soy el sol que golpea su pecho
en medio de la negrura que lo cierne
y ahoga
Carlos Alberto Roldán-