Tras siglos de sueño profundo, despierta en la ciudad de Nueva York en nuestros días para presenciar el crimen de una joven llamada Esther e inexplicablemente siente la obsesión de vengarla.
El relato se remonta a su juventud mortal en la magnífica ciudad de Babilonia, cuando era un judío culto, rico y bello, plenamente dedicado a su tribu hebrea en cautiverio y al culto de los profetas.
Entonces, víctima de un complot palaciego, Azriel es sacrificado al dios Marduk y arrebatada el alma de su cuerpo por sacerdotes y hechiceros que detentan su voluntad al servicio del mal.
Genio inmortal, Azriel se enfrenta en el siglo XX a un hombre ambicioso, el televangelista y terrorista Gregory Belkin, que encarna las fuerzas del mal que siempre combatiera durante su existencia peregrina, y al mismo tiempo se le presenta la anhelada oportunidad de redimir su alma. (Editorial B Debolsillo)
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