Maravilloso sentimiento que nos enaltece y nos lleva a parecernos un poquito a nuestro Padre Celestial…
Gracias a la vida por la vida misma a Dios por su eterno y perfecto amor a Jesús que me enseña que el camino el amor.
A mis hijos que me ayudan a crecer, en bondad en paciencia, en ternura y mucho más por la comprensión… a mis amigos por todos los momentos vividos a pleno, en la tristeza y en las alegrías, en la escasez y en bonanza …
A mis pares por la vida gestada en la humildad al amparo de la naturaleza…
A mis hermanos partes de mi alma a sus hijos que dulcemente me llaman tía.
Y gracias a vos amado mío, que hiciste estallar mi corazón de ternura, entibias mi sangre y alborotas mis sentidos.
Gracias a mis nietos, luciérnagas que brillan y alumbran mi camino con la ternura y el amor que sólo se puede comparar con el amor de Dios…
Gracias al mar que me recuerda la inmensidad del Creador…
A la lluvia que lava la tierra y la hace fértil…
Al sol que nos alumbra y abriga
y a vos, luna, que me invita a soñar que el amor es posible…
Gracias a este presente en donde puedo estar, soñar y asomarme tímidamente a un mañana maravilloso.
Y te agradezco universo por conspirar a mi favor siempre.
Celina del Mar-
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