De un ser
subsiste lo imposible,
detalles
en un objeto predilecto,
instantes azarosos
que anudan sueños con vigilia.
Fronteras de árbol tatuado
que deja su ausencia,
segmentos de gozo
intransitado.
Y ese vacío
que se confunde al fin
con existencia
es la meta extrema
de un largo deseo
por ser otro.
Héctor Berenguer-