Fui entendiendo tu pasado
poco a poco, suavemente,
así como me costó amarte.
Brillas cada vez más en mis días.
Serás rubí o esmeralda, mientras pasan
tantos años de golpe, tanta vida.
Ahora entiendo que el tiempo
es sólo la suma de nostalgias.
El mundo sigue en venta y no sirvió
mojar el mar con lágrimas amargas.
Por eso es tan dulce la espera
por volver al sol o hacia la luna.
Del libro Presagio de luz
Gonzalo Salesky-